En este cálculo intervienen distintos factores como por ejemplo la zona climática de la vivienda, la orientación de la misma, el número de ventanas, su aislamiento, etc.
En Fenisa os aconsejamos que contactéis con nosotros para recibir un presupuesto de aire acondicionado a medida.

Un detalle importante a la hora de elegir una máquina de aire acondicionado, es el nivel de ruido que produce, para asegurarte que tu familia descanse como es debido.
Por eso buscas el electrodoméstico más silencioso posible. Dicho equipo se considera como tal a partir de un nivel sonoro por debajo de 24 dB. Dentro de esta categoría están los que no superan los 16 dB, siendo los más silenciosos del mercado.
Además del confort que proporciona su bajo nivel de ruido, este tipo de aparatos suele tener una buena calificación energética entre A++ y A+++, tanto en la función de calor como en la de frío. Existen una gran variedad de aires acondicionados silenciosos de diferentes marcas entre los que puedes escoger. Además, casi todos los modelos incluyen la función ‘sleep’ o ‘SuperQuiet’, que ayuda a que la presión sonora baje todavía más.

Saber de forma exacta cuánto consume tu aparato de aire acondicionado va a depender de la marca, las características del modelo y de las horas de uso que le demos, así como del clima de la población en la que vivas.
Hoy en día la mayoría de las marcas de aires acondicionados han optimizado sus sistemas de climatización para que generen el menor consumo posible.
Seguro que conoces las diferentes etiquetas de eficiencia energética que existen: A, A+, A++ y A+++, siendo esta última la que mayor eficiencia energética ofrece.

Elegir el tipo de caldera que mejor encaja según tus exigencias no es una tarea sencilla, ya que depende de distintas variables.
Lo primero que hay que tener en cuenta a la hora de elegir una caldera es el tipo de combustible que se va a utilizar. Hay dos tipos principales de combustible: el gasóleo, que se suele utilizar en las viviendas que tienen sistemas de calefacción central, y el gas, que se suele utilizar en edificios comerciales o bloques de pisos.
El segundo factor es la cantidad de energía que necesita la caldera. La mayoría de tipos de calderas funcionan quemando gas natural o propano. La cantidad de energía que producen depende de su tamaño, que puede oscilar entre 10 y 75 kilovatios (kW). Las calderas de mayor capacidad suelen ser más eficientes y menos costosas que las de menor capacidad, por lo que si tienes una casa o un edificio de apartamentos grande, vale la pena considerar la posibilidad de comprar una de mayor capacidad.

A la hora de elegir la caldera de gas para la vivienda hay muchos parámetros a tener en cuenta: desde cuál es la potencia necesaria en calefacción, número de baños de la vivienda, el tipo de combustible que tengo en mi vivienda, y que cumpla con la normativa vigente en el momento de su instalación.
Cuando se tiene un suministro de gas, es importante elegir bien la caldera para reducir los costes energéticos y beneficiarse del equipo más adecuado para su hogar. Modelos, precios, prestaciones...

Mediante el uso de un sistema de suelo radiante para la obtención de calefacción. Su funcionamiento se parece a otros sistemas de calefacción convencional.
La instalación consiste en un circuito de tuberías por las que circula agua caliente, calentando la superficie del suelo.

La placas solares captan la energía proveniente del sol, son almacenadas por acumuladores y posteriormente reutilizan la energía acumulada mediante la circulación del fluido dentro de la instalación. De esta manera se consigue la temperatura confort del agua deseada.
Gracias a este sistema, usted no sólo ahorrará energía y dinero, sino que podrá disponer de agua caliente al instante sin complemento de energía alguno. Su uso más común es para el uso de agua caliente en la higiene personal, lavadora, lavavajillas, etc..